El futuro es fe… El futuro es femenino

El futuro es femenino y no me cabe ninguna duda.

¿Estás de acuerdo conmigo? Me encantaría leer tu opinión después de leer el post.

Si echamos la vista atrás y no me refiero a los tiempos de la reina Isabel de Castilla, si no a cuando yo era pequeña; veo a las mujeres sin proyección laboral y dedicadas en exclusiva a la crianza. Porque antes no tenía sentido, ni siquiera se contemplaba una vida sin hijos, sin marido y un delantal. Antes una se echaba un novio, se casaba y tenía descendencia. Punto pelota.

La que no sufría esa suerte se quedaba para vestir santos, era la solterona o la que algo malo tenía para que nadie se hubiese quedado con ella y de la que hablaban todas las vecinas. Porque nos han hecho creer que somos así, que somos las que hablamos de las demás, que tenemos que competir entre nosotras.

Madre mía qué horror, lo que nos queda aún por cambiar. Lo que tenemos que desetiquetar, desempolvar y reeducar.

Ahora podemos ser solteras y no pasa nada. Podemos decidir que no queremos tener hijos y no pasa nada. Solo tendrás que salir victoriosa de una gynkana de preguntas raras de las señoras, vecinas, tías terceras y abuelas; pero la sociedad te aceptará. Puedes decidir en qué inviertes tu vida, puedes formarte, puedes trabajar y puedes salir sin un señor a tu lado que no pasa nada. O no

¿Aún seguimos juzgándonos entre nosotras? Algo queda, pero ya menos y eso es bueno. Porque aunque lento, el camino avanza.

Aún quedan restos de un pasado rancio que cuesta mucho limpiar. Pero tengo fe en que el futuro es femenino, y no me refiero a que sea solo para las mujeres. NO. La igualdad es el camino de baldosas amarillas que tenemos que seguir. Pero el futuro es femenino porque se van a acabar la competición; los dimes y diretes; el qué dirán; el no vale por sí misma…

¿Cómo? Pues más fácil no puede ser: con nuestro ejemplo. Solo si nosotras dejamos atrás todo eso, nuestras mujeres, hermanas, hijas y nietas no absorberán ese hedor venenoso a pachuli antiguo que tan malo y pegajoso es. De todas depende ayudarnos o ponernos la zancadilla, es nuestra responsabilidad. Tenemos esa obligación con las mujeres del futuro. No podemos fallar.

Seamos ejemplo.

¿Te comprometes a un futuro femenino?

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